En diseño gráfico son muchas las tipografías que podemos agrupar en las familias Serif y Sans Serif. Las primeras se reconocen por la “serifa”, esos pequeños adornos que podemos encontrar en los bordes de cada una de estas letras. En este grupo se encuentran aquellas tipografías que se han utilizado desde la antigüedad, es habitual encontrarlas en prensa escrita y en literatura.
Una de las más conocidas de las tipografías Serif es la Times New Roman.
Por otro lado las tipografías Sans Serif suelen considerarse más contemporáneas y modernas. Su diseño gráfico es más simple y es fácil relacionarla con las tendencias que priman hoy día como el flat design.
La legibilidad de las tipografías
Aunque antiguamente era casi obligatorio utilizar tipografías Serif en los textos impresos, hoy día esa norma se va rompiendo y ya es habitual encontrar tipografías Sans Serif en revistas y diarios. A fin de cuentas lo importante es que el texto sea legible.
Sucede lo mismo en los textos para medios digitales. En el diseño gráfico digital de hace años se utilizaba siempre tipografía Sans Serif ya que la baja resolución de las pantallas hacía complicado leer textos escritos con Serif. Hoy día ese problema está más que solventado y queda a elección de cada uno la tipografía a utilizar.
Debates como que unas son más llamativas que otras o que las Sans Serif son menos formales que las Serif están siempre sobre la mesa. Pero lo único cierto es que es la mejor opción es combinar ambas. De esta forma obtendremos grandes resultados y nos libraremos de prejuicios.
Lo sentimos, no se permiten comentarios.